Robert Lewandowski recibió ayer una dura y fea entrada del guardameta croata cuando salía a despejar un balón. El delantero azulgrana se retiró del terreno de juego visiblemente dolorido, despertando las alarmas en Barcelona en una semana crucial para el devenir del campeonato.

Para sorpresa de todos, el polaco salió de suplente en un partido muy importante para su selección. El seleccionador, Michal Probierz, quisó quitar hierro al asunto en la previa del encuentro alegando que apenas se trataba de una «lesión leve». En el minuto 62 del encuentro, Lewandowski entró al terreno de juego como revulsivo y cuando apenas llevaba 15 minutos en el verde recibió un fuerte golpe. 

Según ha podido saber Jijantes, en los servicios médicos del combinado polaco se cree que el fuerte golpe recibido ayer no impedirá al delantero azulgrana disputar el choque ante el Sevilla en Montjuic. Pese a que el jugador fue visto en zona mixta cojeando ostensiblemente, los médicos tienen el convencimiento que en los próximos días el dolor disminuirá y estará en condiciones de afrontar una de las semenas más decisivas en Can Barça.

Tras el encuentro, el polaco fue supervisado y se determinó que pasaría más pruebas médicas en su llegada a Barcelona. El futbolista está en estos momentos de camino a la Ciudad Condal y aterrizará a las 13.30 hora local en un vuelo privado procedente de Varsovia.